Uno de los platos típicos de la
ciudad es el hornado, sus peculiares características lo han consagrado como uno
de los sabores más apetecidos por propios y extraños en Cuenca.
Existen varios lugares en los que
se puede encontrar esta especilidad, entre ellos figuran todos los
mercados de la urbe, la avenida Don Bosco y ciertas “huecas” que lo ofertan
generalmente los fines de semana.
En el mercado de “El Arenal”
sector de la Feria Libre hay puestos específicos dónde se vende hornado. Doña
Marlene Zhuñio tiene 35 años y trabaja en este lugar ofreciendo hornado hace 17
años.
Ella comenta que este es uno
plato muy buscado todos los días a toda hora y afirma “No hay nada mejor que un
buen hornado con bastante mote”.
Tortillas de papa o llapingachos |
Doña Marlene atiende en su local
desde las 8h00 de la mañana hasta las 18h30 de lunes a domingo. Su pequeña hija, quién hace deberes mientras la acompaña en el “puesto” grita “mi mami prepara el
mejor hornado de Cuenca, por que le mete a un horno grandote de leña”
Ante esta intervención Doña Marlene
indica que prepara 4 chanchos semanales. Para la preparación recoge el animal
del camal, lo adoba con todas las especias y lo deja reposar por un día.
Posteriormente lo mete a un horno de leña por 6 horas y ya esta listo para servir.
“Lo que más le gusta a le gente son las cascaritas, aunque todo lo del chancho
se puede comer por ejemplo la cabeza llevan como ofrenda o para las fiestas”
concluye.
Sin lugar a dudas su sabor, aroma
y sobre todo la tradición han consolidad al hornado como uno de los patillos
predilectos de todas las clases sociales en Cuenca y el resto del país.
El hornado se vende por libras y va acompañado de mote, llapingachos y ensalada. |
Autor: Lucía Ochoa
Una delicia sin duda alguna. Tomar la gastronomía típica de nuestra ciudad y darla a conocer a través de el personaje de una señora que rescata esta tradición culinaria. La forma narrativa que das en el texto es increíble y la forma en la que tomas la realidad de una persona hace de este reportaje algo muy bueno para que la sociedad sepa que no solamente en lo caro y exclusivo hay buena sazón, sino también en los lugares menos pensados.
ResponderEliminarSaliendome de los liniamientos para comentar me dio hambre, no en verdad es muy rescatable este trabajo ya que das a conocer una de las tradiciones que tiene nuestra ciudad y las famosas HUECAS, ademas enfocas tu reportaje a partir del testimonio de Doña Marlene Zhuñio que me parece muy importante.
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